Algo grande

Llevo varios años ya dedicado en cuerpo y alma a mi arte, y sin embargo quiero más. He logrado vivir de esto, hacerme un nombre y callarles la boca a aquellos que repitieron mil veces que no lo lograría. Sin embargo ha llegado el momento de dar un paso adelante y llevar a cabo la obra más importante de mi carrera. De hacer algo grande.

Quiero plantearme un reto, un reto que me encumbre como el mejor de mi generación. Quiero desarrollar una idea, conmover al espectador, transmitirle algo nuevo. Sé que soy capaz de hacerlo, pero todavía no he dado con la forma de aterrizar todo lo que bulle en mi cabeza. La inspiración es así, esquiva y traicionera, pero al final me acabará guiando por el buen camino.

Mis anteriores trabajos han sido de formato pequeño. Exposiciones en lugares poco importantes con exiguas reseñas en blogs culturales, posts en redes sociales y poco más. Lo suficiente para que lograr algunas ventas que paguen las facturas. Algún marchante interesado en ver cómo evoluciona mi carrera y poco más. Esa es otra razón para hacer algo grande: que nadie pueda negar mi genio.

Sé que puede parecer que es la vanidad lo que me mueve, pero en mi defensa diré que todos los artistas tenemos algo de eso. Un ego que nos lleva a esforzarnos, a seguir rebuscando dentro de nuestro estilo nuevas maneras de plasmar algo diferente en nuestros trabajos. No aspiro a llegar al nivel de los grandes maestros ni que me comparen con Michelangelo, Rubens, Velázquez, Van Gogh o Dalí, pero sí quiero avanzar un paso más y acercarme a ellos.

La pregunta es qué hacer, porque quiero hacer algo grande, pero… ¿qué? Porque se me ocurren muchas cosas pero ninguna lo suficientemente buena. También me gustaría sacudir conciencias sin caer en banalidades absurdas, manidas ideas políticas que me coloquen a favor de unos u otros, cuestiones religiosas y otras polémicas vacías. Tiene que ser algo transgresor y polémico pero al mismo tiempo respetuoso, que suponga un reto intelectual pero con un mensaje que pueda entender mucha gente. Algo potente, impactante.

Al no tener clara la idea se hace muy difícil pensar en el medio de plasmarla: materiales, medidas, estilo… Es lo malo de querer hacer algo grande, que te obliga a pensarlo mucho, a contemplar posibilidades, a sufrir horas y horas sin que la idea se muestre clara antes de empezar a trabajar. La verdadera complejidad de hacer algo grande, sin saber qué, es el bloqueo. Y tengo miedo de que ese bloqueo termine por llevarme a no hacer nada.

Foto de portada: ©Pexels